Poetry of Issue #7 Page 39
Sopló el viento
(Puerto Rico después del Huracán María)
por Myrna Nieves
Sopló el viento
Y se asustaron los pájaros
Sopló el viento
Temblaron los árboles
Bajaron ríos del cielo y nublaron los ojos de las casas
Se agrietó la brea de los caminos
Se desmayaron los puentes sobre las aguas
Y
no
se
pudo
respirar
No hubo qué comer ni qué beber
N.o. h.u.b.o. a. q.u.i.e.n. l.l.a.m.a.r.
Huérfanos de luz, los vecindarios se recogieron de noche bajo el temor
Reinaba la desolación de un nuevo siglo inescrutable
Las vacas colgaron de los postes de luz quebrados
Los caballos, hinchados y pálidos, yacían rígidos a la orilla de los ríos
"Ayúdennos", escribieron con tiza en las carreteras
Pero los helicópteros no aterrizaban
Y los noticieros extranjeros mostraban los rostros "étnicos"
Con curiosidad y breve conmoción
Un presidente lanzó rollos de papel a las multitudes, imitando baloncelistas
Los barcos con ayuda fueron interceptados y limitados.
Que se hundan, era el mensaje.
Que se mueran, era la señal.
Que se jodan, escupían en el argot callejero.
Que lo vendan todo para comprarlo en baratillo
Y rehacer la belleza de los campos
La delicia de las playas
La majestad de las montañas
La gloria de los amaneceres
Sera ideal para turistas y millonarios
Nuevas minas de oro para los nuevos-viejos colonizadores.
Pero no murieron todos
Ni se fue la mayoría
Una nueva unidad creció como árboles que florecen
Entre los vecinos
Y cocinaron lo poco que había juntos y comieron juntos
Lloraron juntos
Se amaron juntos, en la desgracia
Y no se dieron por vencidos
Desde lejos su diáspora extendió una mano como rama colosal
Enviaron provisiones, recaudaron fondos
Ofrecieron lo poco o mucho que poseían
Abrieron sus puertas y el corazón
El camino será arduo pero lo recorreremos juntos, decían
Y la construcción será distinta
El sueño será transformado con lucidez y justicia
Mientras se discute el ideal futuro, según unos
o el desvarío iluso, según otros
Entre lo que parecían ser destellos de paneles solares
En la lejanía de un monte o una barriada
Frente a una casa sin techo
Una niña aguzó el oído
Alzó la mano, apuntó a los cielos
Arriba, volaban frente al nuevo sol unas siluetas---
Es que regresaban por fin las cotorras al paraíso
Y se comenzaban a escuchar los pitirres en la joya más verde sobre la Tierra.
Myrna Nieves